un hogar lejos de casa donde la amabilidad de Youssef y su familia se siente como una cálida abrazo con cada desayuno

Desde el primer momento, la hospitalidad de Youssef y su familia me hizo sentir como en casa. La tranquilidad del Riad Honey, con su hermosa terraza, es simplemente perfecta. el desayuno es un festín de sabores marroquíes, ¡no puedo dejar de recordar el yogur natural que servían! Esto me hizo ser aún más feliz durante mi estancia.

tranquilidad absoluta, decoración con buen gusto, acceso fácil a excursiones

La zona puede sentirse algo descuidada, con una clara falta de limpieza en las calles!!! ¡Acceso confuso para llegar al Riad si no conoces bien la medina!!! La distancia a la plaza principal puede ser un inconveniente para algunos.

El desayuno en la terraza era espectacular.

Desayuno en la terraza de lujo.

agradable estancia con un pequeño detalle a mejorar

El trato del anfitrión fue excepcional, siempre atento y amable, haciendo que nos sintiéramos como en casa. El desayuno en la terraza, rodeados de un jardín encantador, fue un momento verdaderamente especial cada mañana. La habitación, decorada con buen gusto y muy cómoda, superó nuestras expectativas.

La ubicación, aunque agradable, puede ser un poco distante para algunos, ya que se requiere caminar unos 15-20 minutos hasta el centro.

La terraza cubierta de plantas es un verdadero oasis para disfrutar el desayuno. cada mañana era como un festival de sabores y colores. La habitación, con su hermosa decoración y cómoda cama, brillaba más que una estrella en el desierto. Tan relajante que hasta uno se siente como un rey o una reina.

Acceso algo confuso

La comida era espectacular. el desayuno en la terraza fue un verdadero lujo con yogur natural y otros manjares. Además, el anfitrión fue increíble, gestionando todo con gran cuidado y atención.

El trato fue excepcional, con un anfitrión siempre dispuesto a ayudar. La habitación era acogedora y tranquila, con una cama muy confortable y baño limpio, ideal para relajarse. Los desayunos, llenos de sabores locales como el yogur natural y opciones frescas, fueron un verdadero deleite. Sin embargo, la ubicación está a unos 20 minutos a pie del centro, lo que puede ser un inconveniente, y en la zona se respira una cierta pobreza que podría incomodar a algunos. Además, el acceso puede resultar confuso para quienes no conocen bien la medina.

Riad Honey es un lugar ideal para relajarse. El trato de Yusef y el resto del equipo fue increíble, siempre pendientes de nosotros. La habitación era cómoda y limpia, exactamente como se ve en la web. Realmente disfrutamos de los desayunos, con un yogur natural espectacular y productos frescos. Además, la ubicación es perfecta, a 15-20 minutos caminando de la plaza, lo cual es genial.

lo recomiendo encarecidamente

La habitación era sencilla pero muy cómoda, justo como en las fotos. La cama estaba genial, perfecta para descansar después de un día de caminatas. El baño era pequeño, pero siempre estaba limpio, así que no era un problema. Me gustó que tuviera calefacción, ya que las noches pueden ser frescas. Todo en el Riad daba una vibra acogedora y tranquila.